martes, 6 de octubre de 2009

Amor, Magia y Matemáticas (Relato de Ficción) - Primera parte

El amor es magia, y la magia es ciencia, una ciencia que no logramos entender

Invirtiendo el silogismo: entender la ciencia del amor elimina la magia, y yo Norbert M. Thouerau, profesor de Cálculo Avanzado de la Universidad de Gotinga, a punto de ser nombrado Catedrático a los 32 años, soy presa del más poderoso hechizo, y me veo sometido a intolerables molestias por esta causa, desde que viví con Kara B. Rosenthal, becaria de la Biblioteca de la Duquesa Anna Amalia, en Weimar, la historia que voy a relatar

Las Matemáticas y el Amor son mis intereses capitales. También me apasionan la Bilogía, la Literatura, La Historia, La Economía, La Antropología e incluso el Arte

Algún neófito dirá que estos campos son inconexos y pondrá en duda mi seriedad y mi rigor científico, pero las Matemáticas son la raíz de todo, si bien su penetración es más lenta en algunos terrenos, del mismo modo que nos resulta más fácil intuir los fríos y geométricos átomos en el carbono de un diamante que en el aroma de una Rafflesia Arnoldii de Borneo

Pese a que tanto mi físico como mi psique distan mucho del estereotipo clásico del Don Juan, mi apasionado interés me ha permitido lograr algunas conquistas dignas de mención. No obstante quizá "conquistas" no sea el vocablo adecuado. Me considero más bien un explorador, y si por mérito o azar he logrado "conquistar" algunos corazones, no he tenido a bien conservar mi poder sobre dichos reinos, y he abdicado presto de mi reinado en busca de nuevos continentes ignotos

Las más de las veces, lejos de "conquistar" he sido vencido, y obligado a huir, retrocediendo sobre el terreno ganado, o hacia delante, abandonando estandartes y sacrificando orgullosos corceles para terminar arrastrándome, con las fuerzas perdidas, a esconderme en algún oscuro cuartel de invierno donde lamer mis heridas y aprender de los errores cometidos, si algo cabía aprender

Es en estos momentos siniestros cuando el voraz demonio de Las Matemáticas despierta en mi, y en su afán por extender sus persistentes tentáculos descifra las claves ocultas para el ojo ciego del ignorante o el sentimental

En estos mis años de juventud he analizado y creo haber descifrado las claves del amor y reducido estas claves a componentes elementales referidos a las características de los individuos involucrados, sus circunstancias y sus actos o conductas, y he elaborado un sistema de operadores, que permiten establecer las relaciones lógicas entre unos y otros, del mismo modo que las operaciones aritméticas básicas, como sumar, multiplicar y dividir nos permiten realizar cálculos numéricos

A modo de ejemplo permítaseme citar a mis propias amantes, dado que ellas han sido los sujetos de mi estudio, y citaré mi liaison con la dulce Melanie, primera violinista de la Orchestre Philarmonique de Strassbourg, la más delicada flor nacida en el imperio francés, descendiente de aristócratas desposeídos Andrianne, originarios del Madagascar

Conocí a M. en una fiesta en el Kensington Roof Gardens, de Londres. Una amiga me desafió a seducir a la mujer más bella y elegante del lugar, y ambos convenimos que M. sería la presa propicia. Siendo M. de nacionalidad y educación francesa la invité a cenar en el Babylon y después de la cena la acompañé a su apartamento en Lancaster Gate, cruzando Hyde Park, para lo cual tuvimos que saltar la cerca. Luego la besé junto al estanque de los cisnes

M. había roto recientemente con su novio Italiano, ejecutivo de un importante banco y compulsivamente infiel. M. es la amante más consumada técnicamente a la par que voluntariosa que he conocido. También es una mujer de portentosa inteligencia que habla seis lenguas a la perfección, pero no domina el Alemán, y sus esfuerzos en comunicarse conmigo en mi propio idioma le hacían parecer algo estúpida a mis ojos

Como dice el Conde Drácula en la novela de Bram Stoker, incluso el vestigio del más mínimo acento en el interlocutor permite al hablante nativo sentir condescendencia

M. me fue fiel en el tiempo que duró nuestro breve idilio, y siendo una mujer en extremo sensata, no sucumbía a excesos melodramáticos. Nuestra relación fue atemperándose hasta degenerar en una cálida amistad

Por otro lado Seeta Patel, bailarina de Barat Natyam y profesora de Anatomía de la University of Nothingahm, fue un caso muy distinto. Coincidimos en un club de Malta, y yo, abrumado por sus cautivadores rasgos exóticos me hice pasar por camarero para colarme en la zona VIP donde bailaba ociosa con otros de su compañía de danza, de gira por Europa

Tras bromear un rato le confesé mi interés en bailar con ella, y le dije que estaba dispuesto a despedirme de mi trabajo para ello. Me despojé de mi uniforme de camarero y bailé con el torso desnudo junto a S., que reía asombrada de mi locura

S. era tan capaz de conducir a un hombre a la demencia con la sensualidad de sus movimientos femeninos como de diseccionar el cadáver de un vagabundo sin nombre para mostrar la disposición de los órganos a los estudiantes de primero de medicina

Como toda diva, tenía un concepto muy elevado de si misma y su sexualidad. El tatuaje en sánscrito en su coxis rezaba secretos eróticos que nunca quiso desvelarme

En poco tiempo me sometió a la adicción y la locura. Violentos episodios de celos me condujeron a una espiral de autodestrucción de la que tardé dos años en reponerme por completo, si es que realmente puedo decir que me he recuperado

Carleen, en cambio, me permitió experimentar el polo opuesto. Esta belleza sureña era la jefa de animadoras del los Longhorns de Austin, Texas, equipo de la Liga Universitaria de Fútbol Americano

La conocí en un bohemio hostel de Turingia mientras viajaba con una amiga recabando testimonios para su tesis pre-doctoral sobre las vidas de refugiados judíos en la Alemania post-nazi

Pese a sus dieciocho años recién cumplidos, su piercing en la lengua y sus espectaculares pechos operados (según me confesó traidora su amiga en la primera ocasión que tuvo), podía mantener una conversación erudita sobre el sistema económico nacional-socialista citando a Toynbee y otras autoridades en la materia

Mis canallas comentarios críticos sobre la sociedad americana de la era Bush cautivaron su atención hasta conducirla a mi litera esa misma noche, donde puse en práctica algunos de los trucos aprendidos en mi azarosa educación sentimental. En aquella habitación de hostel que compartíamos con otros diez o doce viajeros de orígenes variopintos me vi obligado a amordazarla con un par de calcetines para evitar un escándalo de proporciones mayores

Por extraño que parezca, C. abandonó a su novio quarterback, a sus amantes delanteros, medios y defensas, y me persiguió por el Viejo Continente en un tour de atléticos coitos que yo permití al principio con sorprendido orgullo y luego con hastío, hasta el desdén

Finalmente tuve que pedir una orden de alejamiento y cambiar mi domicilio, dirección de correo electrónico y página del Facebook, para darle esquinazo, abrumado por su perseverancia y sus ridículas amenazas de suicidio

Bien, todos estos eventos relatados, todas las características de los individuos implicados y las acciones llevadas a cabo pueden ser codificados con símbolos y cuantificadores, ubicados en una ecuación más o menos compleja, que reduce a pura lógica cartesiana el caos aparente, por ejemplo...

...expresa mi tormentosa relación con C., desde lo fortuito de nuestro encuentro, la presencia obstaculizante de su amiga, su juventud y convicciones, mis propias condiciones físicas y creencias, o las circunstancias sórdidas de nuestro primer encuentro

Un cálculo sencillo nos conduce a el resultado final ocurrido en la realidad, siempre y cuando introduzcamos las variables tipificadas extraidas de tablas cuya elaboración y afinamiento es el reto más complejo de todo el sistema

Básicamente: un cálculo similar a este nos permite desentrañar el caos y la engañosa "magia" del amor, reduciendolo a orden

Todas las circunstancias del amor, y todas las características de los participantes en el juego son, por supuesto, fácilmente reductibles a componentes fundamentales, y lo han sido ya por talentos superiores al mio en la historia de La Filosofía y La Literatura, desde los clásicos greco-románicos hasta Tolstoi y Flaubert, pasando por Shakespeare. Yo me he limitado a codificar estas variables matemáticamente

No obstante, pese a considerar este campo un terreno acotado, donde no es posible inventar situaciones realmente nuevas, que no sean una mera re-combinación de ingredientes ya conocidos, debo admitir con pesadumbre que me hallo perdido cuando trato de analizar y someter a la lógica la historia que motiva este escrito

Tras este largo pero necesario preámbulo, procedo al relato

(Continuará)

4 comentarios:

  1. guey, Martín, soy Israel, tengo tu blog entremiras desde que lo presentaste en sociedad jeje, me he impreso el relato, en cuanto lo lea te comento, yo tb tengo algouno por ahí.... mola esto de los blogs,no?, nos hace parecer como más guays y tó...saludos!...isr

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  2. No se si el Sr. Norbert M. Thouerau quiere revelar secretos u ocultarlos, pero sea como sea su historia parece muy interesante… Obstinada!! Esperemos el desenlace…

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  3. Neno, hace tiempo que quiero leer algo de lo que escribes, y lo hago por casualidad y desde la soledad de una nueva apertura de un hostel en salamanca.
    No sé que decir..., eres un puto mesías

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